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Los castillos de La Mariscal abren sus puertas para recorridos guiados

Los castillos de la capital abren sus puertas a la ciudadanía, en el recorrido gratuito que se desarrollará el 28 de septiembre desde las 10:00, como parte de la agenda de actividades programadas por el Instituto Metropolitano de Patrimonio (IMP), en conmemoración a la declaratoria de Quito como Patrimonio Mundial.

La Ruta tomará dos horas y el para recorrer el punto de encuentro será en los exteriores de radio Católica, los sitios a visitar son: el Castillo Faride, construido en 1935, la Casa Alhambra, edificación levantada en 1928 y restaurada por el Fondo de Salvamento (Fonsal), visita al Paseo de los Castillos de Vinci, la iglesia neogótica de Santa Teresita construida en los años 40; Observación de la Casa del ex-presidente Camilo Ponce Enríquez y finalmente las Casas de las 4 esquinas.

El IMP promueve el cuidado así como la conservación de estructuras arquitectónicas antiguas, las cuales, tienen una importancia histórica y forman parte de la imagen urbana que tiene la ciudad.

Difundir la historia de los barrios de Quito, conocer edificaciones patrimoniales que tienen particularidades arquitectónicas y están alejadas geográficamente del centro, es el punto de partida para crear un sentido de pertenencia con los moradores y de esta manera se rescata el valor cultural de la ciudad.

Sí bien el Centro Histórico de la capital es un museo sin paredes, el sector de La Mariscal también se presenta con una cara diferente en su arquitectura, donde los castillos están presentes y se configuran como los bienes patrimoniales alejados del núcleo central.

Esta ciudadela que va desde la calle Veintimilla hasta la avenida Patria y desde la avenida 10 de Agosto hasta la 6 de Diciembre se convirtió en un barrio de gente pudiente.

“Es a partir de 1930, la gente de alto estrato económico, sale del Centro Histórico y comienza a construir hermosas edificaciones que se ubican en La Mariscal. En la década los 40 se puso de moda el concepto de Garden Party, es decir, casas rodeadas de jardines donde se hacían fiestas y reuniones sociales que se arraigaron en este sector”, mencionó Ricardo López, historiador a cargo del recorrido.