Es la proyección externa de la gestión institucional a través de estrategias, metodologías y planes operativos que marcan la promoción de programas y prácticas exitosas 1.
El desarrollo e implementación de las acciones de posicionamiento internacional facilitan: 1) Promover y repotenciar la gestión institucional y sus características diferenciales a nivel regional; 2) Trascender: de tener un papel reactivo en la coyuntura internacional a desarrollar un papel proactivo en la proyección internacional (de demandante de cooperación a oferente de cooperación); 3) Mejorar su imagen y competitividad a través de: Generación de vínculos y lazos de cooperación; Intercambio de prácticas exitosas que lleven a la innovación en tecnología, productos, procesos y metodologías de conservación y rescate del patrimonio y Organización y participación en eventos internacionales.
Los procesos de posicionamiento internacional pueden ser ejecutados mediante: 1) Identificación de las prácticas exitosas de la institución; 2) Gestión adecuada de las solicitudes; 3) Fortalecimiento de la conectividad institucional externa e interna; 4) Establecimiento de la logística necesaria para distribuir y posicionar los productos o servicios a otras ciudades; 5) Generación de enlaces – alianzas interinstitucionales internacionales.
Uno de los elementos más destacables del posicionamiento internacional es la identificación e internacionalización de las “prácticas exitosas”. Estas prácticas pueden ser definidas como proyectos cuyos resultados (bienes o servicios) o procedimientos han generado un impacto positivo. Son también acciones sistemáticas, eficaces, eficientes, sostenibles, flexibles y alineadas a una misión, visión y valores institucionales que suponen la consecución del éxito de dicha institución. Esta gestión está orientada a cambios positivos en la realidad intervenida.
1 Se entiende como prácticas exitosa la diferencia competitiva de IMP; actuaciones de calidad que aporten visibilidad y promoción internacional.