El complejo del antiguo Hospital Eugenio Espejo constituye uno de los conjuntos arquitectónicos más significativos del patrimonio cultural ecuatoriano, siendo actualmente sede de la Biblioteca Nacional del Ecuador “Eugenio Espejo” y el Museo Nacional de Medicina “Eduardo Estrella”, además de funcionar como Centro de Convenciones.
Su historia se remonta a 1898, cuando el gobierno de Eloy Alfaro adquirió un terreno de 240.000 metros cuadrados para construir un moderno hospital civil que reemplazara al congestionado Hospital San Juan de Dios. La primera piedra se colocó en 1901, pero la construcción enfrentó múltiples interrupciones económicas.
Inicialmente diseñado por el arquitecto prusiano Franz Schmidt en 1902, el proyecto fue posteriormente rediseñado por Augusto Ridder y Guillermo Shaeter, quienes introdujeron cambios radicales que incluyeron la demolición completa de lo construido en 1917. El hospital finalmente se inauguró el 24 de mayo de 1933, presentando un estilo ecléctico que combina elementos neoclásicos y art-nouveau, con cinco pabellones independientes separados por jardines, concepto revolucionario para la época.
La Biblioteca Nacional, cuyas raíces se remontan a 1585 con la biblioteca jesuita y que tuvo a Eugenio Espejo como primer bibliotecario en 1792, experimentó múltiples traslados antes de instalarse definitivamente en este edificio en 2020. Actualmente custodia 1’328.752 ejemplares, incluyendo el valioso Fondo Jesuita con 9.095 ejemplares de los siglos XV al XVII.
Por otro lado, el Museo de Medicina, fundado en 1983 por el Dr. Eduardo Estrella Aguirre, preserva la historia médica ecuatoriana desde épocas precolombinas hasta la actualidad. Desde 2008, tras una restauración de cuatro millones de dólares, el complejo funciona también como centro de convenciones, representando un ejemplo exitoso de reutilización adaptativa del patrimonio que mantiene su valor histórico mientras sirve a las necesidades culturales contemporáneas.