El Complejo Arqueológico Tulipe, inaugurado el 24 de marzo de 2007, constituye uno de los testimonios arqueológicos más significativos del Ecuador, preservando el legado de la cultura Yumbo que habitó las estribaciones occidentales de Pichincha entre 400-800 d.C. hasta 1660 d.C. Este pueblo agricultor y comerciante estableció una compleja red de intercambio entre las regiones costeras, serranas y amazónicas mediante caminos denominados culuncos.
El complejo arqueológico destaca por sus siete estructuras hundidas conocidas como piscinas, que incluyen formas semicirculares, rectangulares, circulares y poligonales, funcionando como un observatorio astronómico al aire libre donde el agua reflejaba constelaciones para estudios astronómicos y rituales ceremoniales. Los chamanes yumbos utilizaban estos espacios para ceremonias de purificación, ritos de iniciación y cultos al Sol y la Luna.
El museo ha recibido prestigiosos reconocimientos internacionales, incluyendo el Premio Reina Sofía 2011 de Conservación y Restauración del Patrimonio Cultural, siendo considerado “único en su género en América Latina”. Ubicado en el Chocó Andino de Pichincha, declarado Reserva de Biósfera por la UNESCO en 2018, el sitio contribuye significativamente al turismo sostenible y desarrollo económico local.
Con una metodología museológica multidisciplinaria que integra narrativas visuales, escritas y orales, el museo emplea facilitadores comunitarios locales y tecnología inmersiva con gafas 3D, generando empleo e ingresos para la comunidad mientras preserva y difunde el invaluable patrimonio cultural yumbo.
